Es junto a la
Ermita de San Blas
una de las más antiguas del concejo de Tapia de Casariego. Su construcción parece que data de
los siglos XVI o XVII.
La Ermita está libre de anexos y muestra un buen estado de conservación tras sufrir alguna que
otra reciente intervención. Está edificada con mampostería irregular de pizarra, las fachadas
laterales y el presbiterio están cargadas de cal-arena y blanqueadas. La cubierta exterior es de
pizarra a dos aguas algo muy habitual en la arquitectura tapiega.
Al exterior, la Capilla se muestra como una construcción hermética, al recibir la iluminación a
través de dos pequeños vanos apuntados, abiertos en la fachada oriental y de otro en la
occidental. Accedemos a la Capilla a través de la portada abierta en la fachada principal. Es de
arco apuntado, con dovelaje, aunque también conserva una entrada secundaria en el costado
oriental.
En el interior, todos los espacios se cubren con falso techo plano, a doble agua, aunque
pensamos que originalmente, la cabecera tendría una cubierta abovedada. La pavimentación
interior es moderna. Los acabados interiores están, en parte, blanqueados. Finalmente, la
Capilla remata en una simple espadaña, de finales del siglo XIX, con un solo hueco apuntado,
para acoger la campana, y un remate que imita los pináculos de la arquitectura gótica.